lunes, 8 de abril de 2013

¿Se adelgaza más corriendo o andando ligero?


A casi todos nos parecía bastante obvio el resultado de esta investigación, pero no está de más constatarla: sí, correr es mejor que andar ligero, si lo que pretendemos es perder kilos.
Que se lo digan al científico francés Philippe Fuchs, un investigador de realidad virtual que ha realizado una megamaratón de 10.185 kilómetros que cubre la distancia entre París y Pekín. En su viaje había cubierto 85 kilómetros diarios. Podéis leer más sobre esta hazaña, así como otros ejemplos de personas que corren mucho, en Correr, otra forma de ver mundo: 50.000 km a pie, un corredor de 100 años y footing para ver monumentos.
Es la conclusión a la que han llegado investigadores del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley de California tras un estudio realizado durante 6 años con 15.237 personas que caminan habitualmente y 32,216 que salen a correr varias veces por semana.
Según la investigación, la pérdida de peso y la variación en el Índice de Masa Corporal (IMC) puede llegar a ser un 90% superior por cada hora dedicada a correr en lugar de a caminar, especialmente en personas con sobrepeso y obesas, según recoge la revista especializada Medicine & Science in Sports & Exercise.
Sin embargo, si lo que queréis es quemar mucha más grasa de lo normal, deberéis practicar una modalidad de footing que lleva años poniéndose de moda: correr hacia atrás.
Esta forma de practicar footing, que empezó a popularizarse en Estados Unidos desde Italia y Austria, se denomina retro running. Porque esta modalidad de footing aumenta la fuerza de los músculos traseros de las piernas, poco empleados durante las carreras hacia delante, y también ayuda a quemar casi un cincuenta por ciento más de calorías, amén de que demanda mayor esfuerzo del sistema cardiovascular.